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La IA y el ChatGPT: ¿avances o amenaza para Bill Gates?

La IA y el ChatGPT: ¿avances o amenaza para Bill Gates?

Contrapeceros hoy toca hablar sobre La IA y el ChatGPT: ¿avances o amenaza para Bill Gates?.
Así como muchos de vosotros se estarán preguntando si la inteligencia artificia (IA) y el ChatGPT
son avances o amenazas para la humanidad, el gran Bill Gates analiza y habla sobre las ventajas y
desventajas de esta revolucionaria tecnología que ha invadido nuestras vidas.
Según el desarrollador de software, autor, inversor y filántropo cofundador de Microsoft (junto
con su amigo de infancia, el fallecido Paul Allen), las herramientas de IA de generación de lenguaje
de la compañía OpenAI es una de las dos tecnologías revolucionarias con las que se ha cruzado en
la vida. ¡Pues vaya!, que lo diga él no es cualquier cosa.
La primera vez que se encontró con una tecnología que calificó como revolucionaria fue en 1980.
Ese año, según él mismo relata en su blog GateNotes, conoció la interfaz gráfica de usuario (IGU),
que es la precursora de todos los sistemas operativos modernos, incluido Windows.
Gracias a las IGU nosotros empezamos a interactuar de forma más fácil y natural con la
computadora. Los iconos, menús y ventanas lograron que la “conversación” máquina-humano
fuera más amigable. Todo esto permitió establecer el fundamento para desarrollar los modernos
sistemas operativos.
Lo que hoy nos parece algo normal, en algún momento supuso un gran avance y marcó la
diferencia. Es muy posible que en unos años este alboroto que hoy generan la IA y el ChatGTP se
convierta en un elemento más que pase desapercibido. Bueno, pues eso esperamos, sin embargo,
el panorama, aunque el señor Bill Gates lo quiera minimizar, para muchos puede que no sea muy
alentador.

La IA y el ChatGPT

Cuando Bill Gates se enamoró del ChatGPT

Según escribe en su blog, la segunda tecnología revolucionaria la conoció el año pasado, cuando se
reunió con el equipo de OpenAI, a quien le venía siguiendo la pista desde 2016. Impresionado por
su trabajo, a mediados de 2022 les propuso un desafío: entrenar una inteligencia artificial para
aprobar el Advanced Placement biology exam (AP Bio).
Este es un examen de conocimiento que evalúa más allá de simples hechos científicos, pues exige
pensar de manera crítica sobre la biología. Es decir, ¡realmente quería poner a prueba la capacidad
analítica de una máquina! Gate sabía que si era capaz de superarlo, OpenAI habría logrado un
verdadero avance.
¡Y vaya sorpresa que se llevó el genio de las computadoras! Estaba flipando al enterarse de que lo
que pensaba que les iba a tomar dos o tres años resultó estar listo en unos pocos meses. De las 60
preguntas de opción múltiple del examen AP Bio, el modelo de IA de OpenAI, es decir, el hoy
famoso ChatGPT, respondió correctamente 59 y escribió respuestas sobresalientes a seis
preguntas abiertas. Luego, el examen fue evaluado por un experto externo que determinó que el
sobresaliente ChatGPT obtuvo un puntaje de 5, el más alto posible, equivalente a obtener una A o
A+ en un curso de biología de nivel universitario.

La IA y el ChatGPT: grandes avances

Para Bill Gates, el desarrollo de la IA es tan fundamental como la creación del microprocesador, la
computadora personal, internet y el teléfono móvil. Como ya lo hemos visto, y muchos de
nosotros experimentado en primera persona, cambiará la forma de trabajar, de aprender, de
viajar, de comunicarse y hasta de recibir un tratamiento y un diagnóstico médico. Todo, ¡todo!, se
va a transformar. Industrias completas se reorientarán en torno a ella y los profesionales y las
empresas se distinguirán por la capacidad que tengan de usar la IA a su favor.
Gates, que como si fuera poco, es un gran filántropo, se ha comido el coco pensando cómo,
además de ayudar a las empresas y a las personas a ser más productivas, la IA puede contribuir a
reducir algunas de las peores desigualdades del mundo. Según expone en su blog, la peor
inequidad a nivel mundial es la salud: ¡¡cinco millones de niños menores de cinco años mueren
cada año!! Y lo más impresionante es que estos críos, la mayoría nacidos en países pobres,
mueren por causas tan pero tan prevenibles como la diarrea o la malaria.
Sumado a lo anterior, y contrario a lo que se podría pensar, la IA puede ayudar a que los
estudiantes mejoren sus habilidades matemáticas básicas, algo que, sin importar la profesión que
elijan, los preparará para el éxito. Y por supuesto, el medio ambiente no se podía quedar de lado.
El cambio climático es otro de los ámbitos en los que Gates está convencido que la IA puede
contribuir.

 

La IA y el ChatGPT

La IA y el ChatGPT: ¿grandes amenazas?

Pues bien, como por lo general no todo puede ser siempre color de rosa, y menos cuando se habla
de la temida posibilidad usada como argumento en decenas de películas de ciencia ficción que han
llenado las salas de cine desde el siglo pasado hasta nuestros días, aquella que dice que los robots
eliminarán a los humanos y dominarán la tierra, Bill Gates también se cuestiona sobre las
implicaciones que el ChatGPT puede tener para nosotros, los simples mortales.
Gates, quien a través de Microsoft invirtió 10.000 millones de dólares en el GPT-4, el último y más
grande modelo de IA lanzado por OpenAI hace un par de semanas, reconoce que todo avance
tecnológico disruptivo puede ponernos un poco nerviosos (¡A que sí!) porque nos plantea grandes
interrogantes sobre temas difíciles y sensibles como el futuro de la fuerza laboral, el sistema legal,
la privacidad, los perjuicios, entre otros.
El magnate reconoce que los modelos actuales de IA, a diferencia de los humanos (bueno, de
algunos humanos) no son realmente buenos para comprender el contexto de las solicitudes que se
le hacen, por lo que sus resultados pueden contener información poco precisa y certera fruto de
su “imaginación” y no de datos precisos y hechos reales.
Sin embargo, esto son temas técnicos del ChatGPT y la IA que, sin lugar a dudas, serán resueltos en
muy poco tiempo. Lo que realmente importa es resolver los planteamientos éticos, morales y de
seguridad que traen consigo estos avances.

Por ahora, para que os podáis ir a dormir tranquilos, Gates asegura que ninguno de los desarrollos
de los últimos meses nos ha acercado sustancialmente a una IA realmente fuerte; que “todavía”
(no sabemos cuánto tiempo necesiten par hacerlo) no controla el mundo físico, y que no puede
establecer sus propios objetivos. Así que, mientras lo logra, date una vuelta por la tienda virtual de
ContraPC y vuélvete amigo de la tecnología, puede ser que si algún día los robots deciden
exterminarnos, tú seas perdonado y elegido para preservar la humanidad.

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